domingo, 31 de julio de 2011

A río revuelto, ganancia de Jenson.




Después de acudir a un Gran Premio, se produce (o al menos a mí me sucede) un fenómeno bastante desagradable, que consiste en que las dos o tres carreras siguientes, que tengo que ver por la tele, me saben a muy poco por muy buenas que sean, porque inevitablemente las comparo con lo vivido ese fin de semana tan especial y las comparaciones, como todo el mundo sabe, son odiosas. Pero el increíble Gran Premio de Hungría casi ha conseguido que no sintiera para nada ese fenómeno o, al menos, no en la medida en que lo sentí el año pasado.

La carrera en el Hungaroring ha sido apasionante. Una vez más, el clima excesivamente frío y lluvioso que hay este verano en Europa jugó a favor del espectáculo. Este era un Gran Premio especial para muchos, por ejemplo, Fernando Alonso cumplía aquí 30 años y 30 carreras con Ferrari, Jenson Button cumplía 200 GP, Nico Rosberg 100, Toro Rosso otros 100, los 25 años del circuito... Además, este circuito nos trae a los aficionados muchos recuerdos. Algunos positivos, como esa carrera apasionante de 2006 que empezó con una remontada imposible de Fernando Alonso bajo la lluvia (en mi opinión, su mejor carrera, aunque acabó mal por cualpa de una tuerca mal ajustada) y acabó con la primera victoria de Button y el único podium de su vida para Pedro Martínez de la Rosa. Otros son muy negativos, como el accidente de Felipe Massa en 2009 que nos tuvo a todos con el corazón en un puño mientras su vida pendía de un hilo. Con todos estos datos y antecedentes, la carrera prometía emoción, a pesar de tratarse de un circuito poco propicio para adelantar (incluso con KERS y DRS) y de que no había previsión de lluvia para el domingo.

Previsión que, para variar, no se cumplió. La lluvia hizo acto de presencia antes del inicio de la carrera, obligando a todos a salir con los neumáticos intermedios. En la pole volvía a estar, tras un par de carreras sin ocupar su posición habitual, Sebastian Vettel. A pesar de su sospechosa mano vendada y de los rumores que indicaban que se estaba sintiendo la presión, el sábado Seb había vuelto a demostrar por qué lidera el Mundial con esa ventaja. A su lado partía Hamilton, ganador del pasado Gran Premio, y detrás de ellos Button y (sorprendentemente, por primera vez en mucho tiempo) Massa por delante de Alonso. La distancia entre los dos Ferrari en calificación fue muy poca, pero suficiente para levantar un poco la moral de Felipe, después de muchísimas carreras calificando por detrás de su compañero. Detrás salía Webber, muy rezagado con respecto a Vettel, y dando un paso atrás importante después de sus últimas poles. Hay que decir en su defensa que tuvo problemas con su coche. En la salida, Alonso se veía superado por los dos Mercedes de Rosberg y Schumacher, a los que adelantó poco después, aunque no tardaría en salirse de pista y regalarle de nuevo la posición a Nico. No era el único Ferrari con problemas para mantenerse en pista, ya que Massa sufría un golpe contra las barreras que, aunque mutiló la parte trasera de su monoplaza, no le impidió continuar en pista. Cuando Fernando recuperó por fin la posición con Rosberg de nuevo, en la vuelta 9, los de delante se habían alejado bastante.

La pista empezó a secarse rápidamente al no caer más lluvia, y los pilotos pararon en boxes para poner neumáticos de seco. Al ser una carrera en mojado, no había obligación de poner los compuestos más blandos (los superblandos en esta carrera) y los más duros (los blandos en este caso), ofreciendo la posibilidad de elegir estrategias muy diversas. Después de la primera parada en boxes, la situación de carrera era: Hamilton, Button, Vettel, Webber, Alonso. Durante esta primera parte de la carrera, hubo adelantamientos, coches que se salían de pista e incidentes, el más espectacular el incendio en el coche de Heidfeld. No es la primera vez que le sucede algo así al Lotus Renault y, si su coche además de no correr no es seguro, deberían revisarlo bien a fondo. Error de seguridad también no sacar un Safety Car en una situación tan peligrosa, con un coche en llamas justo en la salida del pit lane. Mientras tanto, los pilotos hacían una nueva parada, los de delante manteniendo posiciones. Unas vueltas después, Hamilton cometería una imprudencia que le costaría cara. Hizo un trompo y, por miedo a perder el liderato, estuvo a punto de llevarse por delante a un Force India en su intento de darse la vuelta rápidamente. Esto le costaría un drive trough que, de todas formas, no sería lo único que le haría perder la carrera. La lluvia volvió a caer ligeramente mientras los pilotos volvían a parar en boxes. Fernando paró muy pronto a cambiar el juego de superblandos, que parece ser que estaba defectuoso, por uno de blandos. Pero la entrada en boxes más sorprendente tendría lugar unas vueltas después. La fina lluvia se mantenía, y el líder Hamilton paraba a poner neumáticos intermedios. Decisión inexplicable para alguien que va primero. Sé que es fácil decirlo desde fuera y cuando ya ha terminado la carrera, pero la estrategia de Lewis fue un claro error. Otro error, pero este de pilotaje, lo cometió Fernando, impidiéndole cualquier posibilidad de acercarse a la segunda posición de Vettel. Mientras tanto, Jenson, despojado de la presión de su compañero de equipo, con el que había estado luchando cuerpo a cuerpo hasta la parada para poner intermedios, caminaba con paso firme hacia la victoria.

En las últimas vueltas, la emoción la pusieron sobre todo un grupo grande de pilotos (Jaime entre ellos) luchando por los últimos puntos y Hamilton y Webber luchando por la cuarta posición, que finalmente se quedaría el inglés. En cuanto a Alguersuari, tuvo la mala suerte de chocar con Kobayashi y perder la posibilidad de terminar octavo, logro que le correspondería a su compañero Buemi. Al menos, Jaime consiguió quedar décimo y llevarse el último punto. La carrera ya no dió más de sí, y terminó con una increíble victoria para Jenson Button en su GP número 200, seguido de Vettel, que mantiene sin problemas su ventaja en el Campeonato, y de Fernando que, aunque no hizo su mejor carrera ni mucho menos (calificó por detrás de Massa, perdió posiciones en la primera vuelta, tuvo varias salidas de pista, le falto ritmo en muchos tramos de la prueba...) consiguió arañar su cuarto podium consecutivo. Detrás de Hamilton y Webber entró Massa seguido de Di Resta, que consiguió una espectacular séptima posición con su Force India. Octavo fue Buemi, noveno Rosberg y décimo Alguersuari. Los dos Hispania terminaron la carrera. Luizzi lo hizo en 20º lugar pero lo increíble fue lo de Daniel, que terminó 18º... doblando a D'Ambrosio y al propio Vitantonio.

En resumen, una gran carrera antes del inevitable parón veraniego. Incidentes, adelantamientos, meteorología cambiante, un coche ardiendo... y un tal Jenson volviendo a pescar, 5 años después, en río revuelto.

1 comentario:

  1. ¡que pedazo resumen, muy bien!

    De por mi que se le levante la moral con una victoria ;)

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