martes, 20 de julio de 2010

Experience is everything.

Antes de nada, mis disculpas por haber estado un tiempo desaparecida de este blog. Ya han pasado unos días de la carrera en Silverstone, pero me gustaría comentar mi experiencia allí.
Creo que para un aficionado a la F1, un lugar como Silverstone debe ser un templo de visita casi obligada a lo largo de su vida (siempre que las circunstacias lo permitan, claro). Lo que quiero decir es que si alguien se está pensando ir a un Gran Premio y duda sobre cuál elegir, aconsejo el británico. Ya no es sólo la sensación que produce ver los coches en directo, tan diferente a verlos por televisión. Ya no es sólo estar tan cerca de tus ídolos, ver que son seres humanos tan reales como tú y como yo. No, hay algo más. Es, sobre todo, el ambiente. La sensación de que allí, en el circuito donde empezó todo, donde se disputó la primera carrera de F1, hay algo, un espíritu vivo de amor por este deporte que se encarna en cada una de las personas (muchas, muchísimas, por cierto) que acuden al circuito a lo largo del fin de semana. En el caso de Inglaterra, ves sobre todo gorras y camisetas de McLaren, también algunas de otros equipos (Ferrari, Williams, Mercedes, Lotus...) pero sobre todo ves mucho respeto, respeto hacia la F1 como deporte y hacia todos y cada uno de los pilotos y equipos, y tienes esa sensación de "no puede ser que toda esta gente estemos mal de la cabeza. Esto tiene algo de especial". Hombres, mujeres (muchas, por cierto). Jóvenes, mayores. Parejas, grupos de amigos, personas solas a su bola. Ingleses, polacos, españoles. No importa, todos con el mismo sentimiento, que nos llevó a pasar horas y horas en el circuito, en ese lugar mágico. Allí el tiempo pasa muy deprisa. El viernes, llegamos a tiempo para los primeros entrenamientos libres de F1, nos sentamos a verlos y nos quedamos enganchados a todas las competiciones (había muchas más categorías que la F1) hasta que terminaron. El sábado a las 6 de las mañana estábamos allí, tuvimos que ponernos a la cola porque aún no habían abierto el circuito. Cuando lo abrieron, compramos algunas cosas en la zona comercial y recorrimos el circuito entero alrededor, subiendo a las distintas gradas y observándolo desde distintos puntos de vista, hasta que empezaron las competiciones. Allí nos quedamos hasta que terminó la última. Me fui de allí con muy buen sabor de boca por la tercera posición de Fernando en la calificación. El domingo volvimos a llegar allí a las 6. Cuando entramos en el circuito hacía frío y caían unas gotas, pero resultó ser una falsa alarma y poco después salió el sol. Vimos las competiciones de la mañana y el Drivers Parade, ya desde nuestro asiento de la grada Luffield B, que debo decir que es una de las mejores del circuito (el domingo ya era obligatorio sentarse donde decía en la entrada, pero ya habíamos aprovechado el sábado para ver algunas competiciones desde la grada principal, para ver las salidas). Aprovechamos cuando saludaban los pilotos desde el camión para mostrar nuestra bandera de Asturias gigante, intentando darle un poco de suerte a Fernando (¬¬'). Debo decir que el peor momento es el que pasa entre el Drivers Parade y la salida de la carrera. Empieza a sentirse una tensión, un nerviosismo increíble, y no lo digo sólo por lo que sentía yo, podía notarse en todas las personas de la grada, necesitábamos que la carrera empezase ya, se palpaba la tensión. Y, por fin, la vuelta de formación, que aproveché para hacer las últimas fotos decentes (sabía que en la carrera no sería capaz ni de coger la cámara, que no podría apartar la vista de la pista ni un momento, y así fue). Se colocaron en la parrilla, y por fin la salida. Luffield es un gran lugar para ver la carrera, pero el problema de ser la última curva es que no te enteras de lo que pasa en la primera vuelta. Teníamos cerca un marcador y una pantalla gigante (la pantalla un poco más lejos que el marcador), pero pasaron tantas cosas que me perdí completamente, y cuando pasaron por delante mío y vi que Fernando se había quedado bastante atrás y, sobre todo, que Vettel y Massa iban completamente rezagados y entraban en boxes, me quedé con una cara digna de mención. Y sucedió algo increíble, cuando vi a Vettel y Massa en aquella situación tuve un tremendo impulso de aplaudirles, de darles fuerzas. Y no fui la única que lo hizo. A partir de ahí, fui siguiendo bastante bien la carrera. Y sucedió, el adelantamiento ilegal de Fernando a Kubica. Lo vi por las pantallas, y pensé "ahora tendrá que dejarle pasar". Pero no fue así. Y pensé que le caería una buena sanción, pero pasaban las vueltas y no sucedió nada... hasta que salió lo del drive trough, y justo tuvo que salir el Safety Car en ese momento por las piezas del coche de Pedro (pobre Pedro, con lo que nos habíamos cansado de aplaudirle todo el fin de semana). Cuando vi a Fernando entrando en boxes delante de mis narices (teníamos una buena vista de la entrada a boxes desde nuestra grada) sentí sobre todo una gran decepción, y cuando volvió a pasar por delante nuestro le aplaudí como nunca. Pero hubo algo en todo eso que me gustó, nadie en la grada se rió de él o le abucheó. Los pocos ferraristas que había también trataron de darle ánimos, pero todo estaba perdido. Y, cuando parecía que no podía pasarle nada más, casi al final de la carrera, un pinchazo le hizo tener que volver a pasar por boxes. Además, Jaime se quedó tirado delante de nuestras narices, eso sí, me sirvió para hacer una buena foto de la grúa llevándose su coche. Y una de las mejores imágenes que vi justo delante mío (la mejor en el sentido de espectacular, no de que me alegrara por ello) fue la "entrada en boxes" un poco accidentada de Felipe, que salvó la gran ostia por muuy poquito. También pude ver en vivo algunos adelantamientos, cosa que en la F1 actual no es muy fácil de ver. Y, a todo esto, se acabó la carrera. De verdad parecía que había durado cinco minutos, diez como mucho. No me podía creer que se hubiera terminado ya. Allí el tiempo, como los coches, lleva una velocidad muy diferente. Teníamos que irnos a toda velocidad para coger un avión, pero esperamos a que los pilotos pasaran saludando al público desde sus coches, y toda la grada nos pusimos en pie y aplaudimos a Mark Webber, a Hamilton y a Rosberg, y también a todos los demás. Mark iba saludando con una felicidad en el cuerpo brutal. En cambio, a Fernando no le vi ni levantar la mano, iba adelantando a todos poco a poco para bajarse lo antes posible del coche. Normal. No voy a decir nada sobre la FIA y las sanciones que impone a los distintos pilotos, ya está todo dicho. Creo que Fernando pagó caras sus declaraciones de Valencia sobre carreras amañadas. Ahora, por lo menos, ha aprendido a hacer declaraciones más políticamente correctas (de todo se aprende algo... ¬¬'). Estaba triste por él, y por Pedro y Jaime, pero me alegré mucho por Mark. Y también felicito a Lewis, a Nico, y a todos los que quedaron en posición de puntos. Y, porqué no, también a los que no puntuaron, o no acabaron la carrera. Viéndolos allí, te das cuenta del valor que tiene lo que hacen, todos y cada uno de ellos. No pudimos quedarnos más tiempo, asique nos fuimos de Silverstone. Nos levantamos y empezamos a bajar de la grada. Lo último que escuché allí fue a unos aficionados de McLaren comentando la mala suerte que había tenido Ferrari en esta carrera, casi con lástima. Salimos del circuito y vimos algo que nos parecía un atajo para llegar al aparcamiento donde teníamos el coche. El supuesto "atajo" resultó ser el aparcamiento de los camiones de los equipos, allí estaban los camiones de Ferrari, de Red Bull, de Renault, hasta uno de la FIA. Fue lo último que vimos del mundillo de la F1, luego salimos del aparcamiento entre Ferraris, Porsches, Mercedes y algún que otro coche más normalillo. Todo el mundo salía conduciendo de forma muy educada, tanto que parecía casi irónico que salieran de un circuito de carreras (por cierto, vi el mítico cartel de "Silverstone circuit, please drive carefully" xD). Pero, al fin y al cabo, los aficionados a la F1 no estamos mal de la cabeza. Quizás sólo seamos soñadores... soñadores de la velocidad.

PD: Cuando tenga un rato, subiré algunas fotos.

1 comentario:

  1. Que lindo,. y que suerte que estuviste en la carrera.. como me encantaria a mi :) debe ser muy bueno estar en una. el ambiente todo.. saludos!!

    ResponderEliminar